Lecturas

Desocupado lector:

-        Cuéntame un cuento, - te digo,-
-        ¿Cómo lo quieres?
-        Cuéntame un cuento que no le hayas contado a nadie.
Rolf Carlé

Y no fue uno solo sino hasta veintitrés los que Eva Luna, como la Sherezade de “Las mil y una noches”, le contó a su amante. La novela de Isabel Allende ha tardado en llegar a su fin por el tamaño de la misma y por las muchas ocupaciones en las que últimamente me he visto envuelto, pero ha merecido la pena. De nuevo el estilo narrativo mágico de la escritora chilena nos lleva a un mundo de aventureros, amantes, ricos, pobres, prostitutas, mujeres de embajadores, dictadores, campesinos… todos ellos entrelazados por algo común: la pasión, el amor, la venganza, la nostalgia, la compasión, la ironía…, Isabel Allende no deja ninguna emoción intacta en esta novela. Destaco por encima del resto la bella y trágica historia con la que termina la obra titulada “De barro estamos hechos” que novela la historia real de la joven Omaira Sánchez Garzón, que murió ante las cámaras de televisión atrapada por el lodo y las ruinas de su ciudad arrasada por el volcán Nevado del Ruiz en Colombia. Rolf Carlé, el periodista que aparece en la novela “Eva Luna”, en este último cuento, aparece acompañando a la niña en sus agónicos momentos. Esta tragedia le ayuda a regresar a su pasado de dolor no sanado. Carlé no logra salvar la vida de la niña pero ésta sí consigue que se encuentre consigo mismo y encuentre algo de alivio y paz. Y como anécdota durante la lectura, contaros que en la fría mañana del día 7 de diciembre pasado, en el Hotel María de Molina de Úbeda, esperando que llegarán las 13h del mediodía, leí un cuento que se titulaba “Regalo para una novia”. Os recomiendo la lectura de la novela. Un abrazo.

Desocupado lector: volvemos a la lectura siempre reflexiva y conmovedora de Paulo Coelho. Nos hemos acercado hoy a una obra menos conocida “La Quinta Montaña”. El autor brasileño novela la historia bíblica del profeta Elías, cuya vida se sitúa en el siglo IX antes de Cristo y aparece en el Antiguo Testamento, en el Libro de los Reyes.
El argumento se centra en el tiempo que Elías pasó en Sarepta. Huyendo del Dios celoso que da protección y amor pero que exige una respuesta fiel y arriesgada del profeta, Elías escapa a las montañas esperando la muerte a manos de los soldados del rey Acab y su esposa Jezabel. El profeta ha denunciado los pecados del pueblo y de la monarquía que se han separado de Yavé provocando una persecución contra todos los profetas del Dios de Israel. En esta huída Elías es llevado por Yavé a la ciudad de Sarepta (Akbar en la novela) y allí se enamora de una joven viuda. Este amor le lleva a tener que decidir y al compromiso verdadero consigo mismo y con Dios. Llegado un momento debe enfrentarse a Dios, como todo hombre ante la experiencia de dolor y sufrimiento, como siglos antes había hecho ya el patriarca Jacob. De esta lucha con Dios siempre se sale sanado. El universo temático de Coelho en el que lo esencial del hombre es buscar el sentido a su vida, vuelve a presentarse en esta obra de tintes y reflexiones geniales y muy útiles para todo el que se considere un buscador. Os la recomendamos vivamente. Un abrazo.


Desocupado lector: novela para el día del Maestro.
Después de muchos años de ser uno de nuestros autores favoritos, de habernos dejado guiar y orientar por él, hemos vuelto a saborear sus intuiciones, sus caminos iniciáticos que siempre llevan a encontrarse con un mismo, con los demás… y de camino con Dios, o quizá todo esto en orden inverso.
Hoy comentamos su obra “Aleph” que, según nos define la siempre denostada “wikipedia” va de esto:
Paulo Coelho realiza en Aleph un viaje de casi diez mil kilómetros en el tren Transiberiano, desde Moscú a Vladivostok. Allí pondrá a prueba sus propias reacciones que le mostraran una forma de relacionarse con él mismo y con las personas que le rodean. Junto a Hilal, una violinista que va en busca del autor brasileño y con el que consigue una particular conexión; y Yao, su intérprete.
Paulo experimentará la vivencia del Aleph, el punto en el que se concentra toda la energía del Universo, donde se encuentra pasado, presente y futuro, y a través del cual conseguirá recordar vidas pasadas y descubrirá una nueva forma de amor que le permitirá acercarse a la paz interior iniciando una nueva vida”.
Pero en este momento queremos dedicar esta novela, con motivo del pasado día del maestro, a todos los docentes implicados en esta hermosa tarea de la educación. Por encima de “LOMCES” y otros experimentos hechos sin el consenso de una mayoría más amplia que la simple, por encima de una ley de educación nueva cada vez que tenemos un gobierno nuevo, por encima de que decidan aquellos que no han cogido una tiza desde siglos y que no aparentar demostrar amor por los niños y niñas, educar sigue siendo bonito. Y acudimos a esta novela para transcribir literalmente una bella historia que en ella aparece acerca del valor de la escuela y de la educación. Que os aproveche y felicidades a todos los docentes. Un abrazo.

“Él nos lleva hasta un lindo edificio donde, en el año de 1754, un hermano mató a otro. El padre de ambos decidió construir ese palacio para albergar una escuela, manteniendo viva la memoria del hijo asesinado. Comento que, al hacer eso, el hijo asesino también sería recordado.  —No es exactamente así —dice Samil—. En nuestra cultura, el criminal comparte la culpa con todos los que le permitieron cometer el crimen. Cuando un hombre es asesinado, el que vendió el arma es responsable también ante Dios. La única forma que tenía el padre de corregir lo que consideraba su error fue transformando la tragedia en algo que pudiera ayudar a los demás”… UNA ESCUELA.


Desocupado lector: “Zakhor, Al Tichkah”, “Recordar, nunca olvidar”, este bello lema está sacado de mi última lectura “La llave de Sarah” de Tatiana de Rosnay. Me ha llegado recomendada por mi amigo y compañero Rafa Castellano que tuvo a bien acompañarnos y guiarnos de manera sabia y didáctica por las calles parisinas el pasado invierno. Durante estos bonitos días nos acercó al París moderno, al Napoleónico, al clásico, al gótico…, y también a aquel París ocupado, cómplice y sufridor de la II Guerra Mundial y de la invasión nazi. Un día nos contó los sucesos acaecidos en julio del 1942 en “El Velódromo d’ Haviv”, donde unos trece mil judíos franceses fueron detenidos por la policía del régimen de Vichy (de los cuales cuatro mil eran niños), con la complicidad de gran parte del pueblo francés, unos por miedo, otros por incapacidad, otros por ignorancia y otros por indiferencia…, y nos recomendó la lectura de la novela “La llave de Sarah”. Dicha obra entrelaza dos historias, una fechada en mayo del 2002, en la conmemoración del sexagésimo aniversario de la redada que llevó a los judíos a los campos de concentración, y protagonizada por Julia, periodista americana afincada en París, a la que se le pide un reportaje de los acontecimientos, y la otra fechada en julio del 1942, en los días de dicha redada, contando la historia de una familia judía que es arrestada en aquella noche aciaga. El jueves 16 de julio de 1942, Sarah y su familia son arrestados en su casa de París por los gendarmes franceses y trasladados al Velódromo de Invierno. Pero no toda la familia Starzynski es trasladada, pues Michel, el hermano pequeño de Sarah de cuatro años, se esconde en el armario de su piso de París, donde él y la niña creen que estarán a salvo. La historia de Sarah quedará marcada para siempre por el dolor y por una enigmática llave y afectará 60 años después a toda una familia de franceses en parte ajena a lo ocurrido. La historia engancha desde el principio y aunque por momentos resulta previsible, no es fácil dejar su lectura hasta el final. No puedo contar más detalles porque desvelaría la trama, sólo deciros que siendo una historia un poco manida, me ha resultado atrayente y bien narrada, sin ensañarse en lo desagradable y contando de manera muy histórica los hechos acaecidos durante aquellos episodios que la humanidad bien haría en “recordar, nunca olvidar” pues como se suele decir “el pueblo que olvida su historia está condenado a repetirla”. Ahora voy a por la versión cinematográfica. Os la recomiendo. Un abrazo.

Desocupado lector: un triste, melancólico y bonito cuento para leer en unos quince minutos, "La señora del perrito" de Chejov. Amores prohibidos y verdaderos, olvidos imposibles y encuentros intentando hallar la felicidad... Chejov muestra sentimientos maduros y encontrados, sensaciones de soledad, resignación, desesperanza o nostalgia que, en este mundo de prisas, se saborean en apenas un rato. Os dejo algunas de las frases del cuento:
Un nuevo personaje había aparecido en la localidad: una señora con un perrito… 
«Si está aquí sola, sin su marido o amigos, no estaría mal trabar amistad con ella», pensó Gurov…, supo que se llamaba Ana Sergeyevna...
Entonces Gurov la miró intensamente, rodeó su cuerpo con el brazo y la besó en los labios, mientras respiraba la frescura y fragancia de las flores…

Ana Sergeyevna estaba conmovedora; había en ella la pureza de la mujer sencilla y buena que ha visto poco de la vida...

-Soy una mala mujer; me desprecio a mí misma y no pretendo justificarme. No es a mi marido, es a mí a quien he engañado. Y esto no es de ahora, hace mucho tiempo que me estoy engañando...

Desde entonces volvieron a verse todos los días a las doce; comían juntos, se paseaban, contemplaban el mar..
-Es una buena cosa el que yo me vaya -le dijo a Gurov-. «¡Es el dedo del destino!»
No lloraba, pero en su rostro se reflejaba tal tristeza que parecía enferma, los labios le temblaban...
Llegó el verdadero invierno, y recordaba todo aquello tan claramente como si se hubiera separado de Ana Sergeyevna el día antes...
En las vacaciones de diciembre se preparó para un viaje; le dijo a su mujer que iba a San Petersburgo a un asunto de un amigo y se marchó...
Sentía necesidad de ver a Ana Sergeyevna...
-¡Soy tan desgraciada! -siguió diciendo sin escucharle-. No he hecho más que pensar en ti todo el tiempo; no vivo más que para eso. Y, sin embargo, necesitaba olvidar, olvidar; pero ¿por qué?, ¡ah!, ¿por qué has venido?...
Para él era evidente que aquel amor tardaría mucho en acabarse; que no podía encontrarle fin. Ana Sergeyevna cada vez lo quería más. Lo adoraba y no había que pensar en decirle que aquello se acabaría alguna vez;
Y he aquí que ahora, cuando su cabeza empezaba a blanquear, se había realmente enamorado por primera vez en su vida...
Ana Sergeyevna y él se amaban como algo muy próximo y querido, como marido y mujer, como tiernos amigos; habían nacido el uno para el otro y no comprendían por qué ella tenía un esposo y él una esposa. Eran como dos aves de paso obligadas a vivir en jaulas diferentes. Olvidaron el uno y el otro cuanto tenían por qué avergonzarse en el pasado, olvidaron el presente, y sintieron que aquel amor los había cambiado...
Y parecía como si dentro de pocos momentos todo fuera a solucionarse y una nueva y espléndida vida empezara para ellos; y ambos veían claramente que aún les quedaba un camino largo, largo que recorrer, y que la parte más complicada y difícil no había hecho más que empezar.


Desocupado lector, según el Diccionario de la Real Academia Española, “Claraboya” es una ventana abierta en el techo o en la parte alta de las paredes. Como una vista área, dicha abertura permitiría entrar en el mundo interior de las casas y de las personas que las habitan, pues, como decía Raúl Brandáo, “en todas las almas, como en todas las casas, además de fachada, hay un interior escondido”. Saramago se atreve a entrar en el universo profundo de una casa de vecinos de la Lisboa de los años 50 donde habita el zapatero-filósofo Silvestre y su buena esposa Mariana, Lidia, la mantenida de un viejo y rico empresario, las cuatro mujeres que suspiran entre costuras por amores perdidos o aún no venidos, la española Carmen sumida en nostalgias y en la dureza del amor desinflado, la sequedad de vida, cuerpo y alma de Justina y su marido Caetano que lloran, cada uno a su manera, la muerte de la niña por la tuberculosis…, dura visión de la realidad familiar, (“el infierno son los otros”, Sartre dixit) donde, pese a todo, se puede aprender que “la vida no vale más que dos lágrimas, que la experiencia sólo vale cuando uno es útil a los otros, que tras esta desgracia hay siempre un gran ideal, una gran esperanza… y que la felicidad participa de la naturaleza del caracol, que se retrae cuando lo tocan”. En esta casa de vecinos se entremezclan los sueños con los dolores, los deseos sin objeto con la voluntad de desear y el temor de querer… se descubre a la vida detrás de una cortina riéndose a carcajadas de nuestros esfuerzos por conocerla.
Y una anécdota acerca de la publicación de esta obra: un joven y desconocido Saramago de 31 años entregó el manuscrito de Claraboya a una editorial sin obtener respuesta alguna hasta pasados cuarenta años. Dolido por el desaire y por la falta de respeto había decidido no publicarla en vida y así ocurrió pues fue Pilar del Río, esposa del fallecido y Presidenta de la Fundación José Saramago, la que se decidió a hacerlo “como si un círculo perfecto se cerrara, como si la muerte no existiera”. Magnífica obra..., como siempre, Saramago. Un abrazo.

Desocupado lector: ¿se imagina que uno de sus vecinos se decidiera a escribir un libro sobre la comunidad o el barrio donde usted vive? ¿se imagina una novela en la que usted se reconociera como uno de los personajes y no saliera muy bien parado? ¿Una novela en la que se contaran las verdades más íntimas, los vicios, hábitos de vida o costumbres de todos sus convecinos? ¿se imagina que el autor de esa novela fuera desconocido para todos y todos se empeñaran en desvelarlo? Pues eso es lo que ocurre en la localidad inglesa de Silverstream cuando la señorita Buncle, asediada por las deudas, decide de forma pseudónima escribir una novela sobre sus paisanos donde no todos sale bien parados. Como la señorita Buncle se considera una persona sin imaginación se dedica a contar la vida de sus vecinos bajo un nombre falso. El libro se publica y cuando comienza a circular por el pueblo los vecinos se ven reflejados y traman una venganza sobre quien ellos creen que es el autor de la novela. ¿Y qué título poner a una novela que va a provocar tanta polémica y malestar? Se va a llamar "El perturbador de la paz" pues ese será el principal efecto que cause entre los convecinos. Y es que eso de verse reflejado en un libro como en un espejo debe excitar y a la vez provocar pavor. Algunos vecinos se dejan curar al verse en ese espejo y otros sólo se enfurecen y pierden la oportunidad de renovar sus vidas y dejar que pasé por ellas el aire fresco. Estamos ante una deliciosa novela, ligera, cómica, ingeniosa, un poco malvada, un libro dentro de otro libro, de la mano de una autora totalmente inédita en España, Dorothy Emily Stevenson, escrito en 1934 pero que de manera fortuita ha caído en mis manos estos días. Os lo recomiendo. Un abrazo.


Desocupado lector, una obra que no da para mucho: “Jesús me quiere” de David Safier. El autor de “Maldito Karma”, recensionado en este mismo blog, se queda a medias en todo, pues la obra no llega a ser comedia, ni reflexión seria, ni teológica ni filosófica. Es una historia rara de una chica en crisis existencial que, en medio de una separación traumática a los pies del altar (llevada a cabo por ella), encuentra su salvación en el mismo Jesús, que ha venido para llevar a cabo el Juicio Final. Siento no poder recomendarla pues os aprecio y deseo que os dediquéis a mejores lecturas. Por cierto, siguiendo con malas lecturas (siempre según mi modesta opinión) empecé también “Las cincuenta sombras de Grey” y no pude llegar a la mitad pues se me hizo insoportable. Es un conjunto de escenas eróticas una tras otra sin más tema..., no me ha despertado ni la curiosidad... ni nada. Veis, hoy no tengo buenas recomendaciones. Un abrazo.


Desocupados lectores: acabo de leer la breve historia “La colonia penitenciaria” de Frank Kafka. Cuenta cómo funciona una máquina, en una colonia penitenciaria, que aniquila a los reos después de escribir con agujas por todo el cuerpo el motivo de la condena. Debo reconocer que su lectura me ha impresionado por la crudeza de la narración, por la sencilla y pacífica crueldad de que es capaz la humanidad y por el enorme simbolismo que recoge. Sugiero varias interpretaciones del cuento: lectura religiosa, con un Dios que derrama sangre para redimir en carne propia (y ajena) las miserias; lectura sociopolítica, que habla del poder omnímodo aplicado de forma injusta contra los débiles de este mundo (totalitarismos, Hitler, Lenin, bancos y desahucios…); lectura puramente kafkiana, aparentemente absurda, pero siempre pesimista con el género humano, mostrando que somos estúpidos y que mejorarnos es un planteamiento imposible . Son frases geniales: “la culpa del ser humano es siempre indudable y sólo desde la herida es capaz de comprenderse”, “durante las primeras seis horas, el condenado vive casi como antes, sólo tiene dolores.” Os la recomiendo, es breve y buena. Un abrazo.




Desocupado lector: después de años teniéndolo abandonado, estos días he vuelto a las intrépidas aventuras de Pérez Reverte con “La Reina del Sur”. La novela está bastante entretenida y engancha su lectura por la fuerza de los personajes, especialmente el de Teresa Mendoza, reina del narco en el sur de España. Grandes redes de tráfico y corrupción donde TODOS están implicados y bien pagados: traficantes, políticos, policía, guardia civil…, un entramado complejo donde da igual la nacionalidad pues lo mismo se implican gallegos, rusos, mexicanos o colombianos del Cartel de Medellín. Quiere uno creer que en este caso la realidad no supere a la ficción, pero me temo de nuevo que este mundo sigue siendo una terrible selva donde poderoso caballero tiene todo el poder y toda la gloria sin importar las víctimas que vayan quedando por el camino. La vida de un hombre, de un amigo, de un socio, de un cliente... vale mientras vale y, como en la obra dice el magnate ruso Yasikov: “los amigos son buenos hasta que se vuelven malos. (Hay que) mirar a un hombre y saber enseguida dos cosas. Primera, por cuánto se va a vender. Segunda, cuándo lo tienes que matar”. Os lo recomiendo. Un abrazo. Ah! Este libro me lo recomendó una compañera psicóloga, muchas gracias María del Mar.


Desocupados lectores: vuelvo a la lectura de Murakami con la obra “Kafka en la orilla”, novela en la que el japonés incluye elementos fantásticos en un cruce de historias con dos protagonistas principales: Kafka Tamura, joven de quince años que abandona su casa, rebelde con causa que busca el sentido de la vida; Nakata, anciano que de pequeño sufrió un extraño incidente de guerra que dejó su mente en estado infantil, que no se rebela ante nada y cuya vida simple tiene ya sentido pero sólo media sombra; y otros secundarios: la doctora Saeki, bibliotecaria cuyos recuerdos son heridas que la mantienen anclada a un pasado sin sentido; Hoshino, superficial compañero de viaje de Nakata que ni siquiera siente que debe buscar sentido; Oshima, ser mítico, ni hombre ni mujer, pero muy humano, que ya parece haber encontrado sentido a su vida y ayuda al joven a encontrarlo…
La obra, por su enorme carga de símbolos, mitos y metáforas tiene mil lecturas posibles: el viaje iniciático e interior que toda persona debe hacer, el valor de la ira, del miedo y de la responsabilidad en la vida, la necesidad de superar y aceptar el pasado por triste y doloroso que sea, una nueva versión del complejo de Edipo donde el padre es asesinado y la madre-amante buscada con ahínco…,
En el transcurso de la obra, el joven Kafka es llevado al interior de sí mismo, simbolizado en el bosque profundo donde debe encontrar la piedra de entrada a su corazón; Nakata es inocente y estúpido pero posee la extraña habilidad de hablar con los gatos, encontrarlos cuando se pierden, sanar a los que con él conviven y abrir la piedra de entrada; La doctora Saeki consigue quemar su pasado y aceptar el presente; Hoshino abandona su superficialidad y es capaz de reconocer cuánta gente le ha querido y cómo no ha sabido corresponderles; Oshima es guía y compañero que educa y acompaña el viaje de Kafka…
Otros temas e ideas relacionadas con lo anterior:
¿Cómo puede tener poder curativo mirar un cuadro?
La ira y el miedo son acompañantes del camino que deben ser conocidos y domesticados.
La música tiene la capacidad de cambiar a las personas, como el arte y la amistad.
No se debe tener miedo ni a la imaginación, ni a los sueños ni a la responsabilidad…
Finalmente, la novela fue seleccionada como la mejor del año en el 2005 por el New York Time, aunque a mí me ha producido sensaciones contradictorias: me ha dejado muy a medias en muchos temas que parecen arrancar y no terminar, ideas que podrían haber sido más profundizadas, pero, ¿quién soy yo para poner pegas a Murakami? Os animo a leerlo. Un abrazo.


Desocupado lector: el genial Saramago ha caído de nuevo en mis manos con su obra “Memorial del convento”, novela histórica basada en la construcción del palacio-convento de Mafra. De Wikipedia tomamos la siguiente información que nos ayude a contextualizar:
El Palacio Nacional de Mafra fue construido por el rey Juan V de Portugal como consecuencia de la promesa realizada a su mujer, la archiduquesa María Ana de Austria, en que se comprometía a construir un monasterio si le daba descendientes. La construcción se inició el 17 de noviembre de 1717 con el proyecto de realizar un convento por 13 frailes franciscanos. Pero pronto la llegada masiva de oro de Brasil hizo que el rey Juan cambiase de opinión y se decidiera por la construcción de un gran palacio que movilizó a más de 52.000 trabajadores de todo el país.
Saramago aprovecha el acontecimiento histórico para entretejer una bella historia de amor entre dos personajes pobres: Baltasar Sietesoles, manco soldado, y Blimunda Sietelunas, bella joven con la extraña capacidad de mirar el interior de las personas. Sus vidas se cruzan con la del cura Bartolomeu Llorenço de Gusmäo, aficionado a volar (personaje también histórico). Juntos intentan construir una nave que les eleve a las alturas, que les permita volar de esta tierra de dolor y de sufrimiento. El curioso artefacto se alimenta de un no menos curioso (y simbólico) combustible pues se eleva con la fuerza del sol y con voluntades humanas.
Saramago se sigue moviendo en su propuesta humanista y atea de la realidad, con un hombre que, como en el "Evangelio según Jesucristo" es de la tierra y proviene de la tierra. Con un Creador que es criatura del hombre, que (ironía) sólo si fuera un Dios de maldad no escucharía las oraciones de los hombres sufrientes…, con una Iglesia que, de tanto mirar al Cielo, dejó en ella toda su luz, compuesta por dirigentes tan escrupulosos con los intereses del Cielo que olvidaron mirar hacia arriba…con una Tierra que ya era lugar de fe y, sobre todo, de responsabilidad.
Dentro del simbolismo del volar como superación, que convoca al hombre a llegar más allá de sí mismo, llama la atención que ni la Teología ni el Derecho haya permitido nunca al cura Bartolomeu volar…
También es interesante la lectura de la historia desde los pobres, humildes y marginados, que también tienen sueños, también lloran, también enferman y también mueren sin saber si esto de la vida ha merecido la pena.
Anécdota final: me contó mi amigo Juan desde Lisboa que Pilar del Río, esposa de Saramago, se enamoró de éste con la lectura de esta obra. Mi respuesta fue rápida: yo ya quería a Saramago antes de esta lectura. Disfrutadla que merece la pena. Un abrazo.


Desocupado lector: también por consejo de una buena amiga me he acercado estos días a la obra de Haruki Murakami, escritor japonés nacido en 1949, creador de obras de ficción y no ficción y figura importante y muy premiada de la literatura postmoderna. He leído “Al sur de la frontera, al oeste del sol”, titulo tomado de una canción de Nat King Cole. Hajime, el protagonista, narra su vida desde la infancia, marcada por la historia de amistad-amor con Shimamoto y por su situación familiar de hijo único. Las circunstancias cambian y separan a los amigos; los años transcurren y Hajime conoce el sexo, que siempre promete mucho más de lo que da, el matrimonio y los hijos, pero siempre bordeando un vacío y una promesa de que “al sur de la frontera” haya algo maravilloso que le plenfique aun con el miedo de caminar hacia “el oeste del sol”, lugar donde los campesinos siberianos, agotados de oscuridad, caminan y desesperan por no hallar más que la nada. En mitad de la novela los antiguos amigos se reencuentran y esto revoluciona sus mundos interiores, más diáfano el de Hajime y más oscuro el de Shimamoto. Ambos buscan con ahínco el amor, la verdad, la vida…, en un tono existencialista, por momentos triste, nostálgico, conmovedor…; me ha agradado su lectura (muchas gracias Lourdes) aunque mi personal asesor de lectura me susurró que “Kafka en la orilla” promete más. Será la siguiente novela cuando acabe con Saramago. Ya os contaré. Un abrazo.




En 1831 escribió Víctor Hugo la genial obra “Nuestra Señora de París”, más conocida por todos por la historia su jorobado campanero Cuasimodo. Esta obra ha llegado a mis manos en uno de esos puestos de libros de bolsillo que se encuentran por las playas andaluzas en los veranos y ha sido un gran regalo. La historia es de sobra conocida por todos, ya se encargó Walt Disney de hacerla cercana para niños y grandes hace unos años, por lo tanto no voy a realizar una “recensión al uso” sino más bien destacar alguno idea que más me ha impresionado. Deciros que Víctor Hugo sigue con la profundidad psicológica de la que ya hiciera gala en “Los miserables”, con la sensibilidad social y la querencia por los pobres y débiles que caracteriza su obra. Se aprende mucha psicología (el mundo de los afectos, de los sentimientos y pasiones…, tan cruel y tan maravilloso) y se aprende también mucha humanidad, la del fondo de los corazones, la que no depende del exterior. Os recomiendo leer el capítulo en el que el arcediano Frollo confiesa su amor y su pasión a la gitana Esmeralda y os recojo aquí un reflejo del corazón de este personaje comparado con su alegre hermano:

“El alegre muchacho, acostumbrado a no seguir otra ley en el mundo más que la sencilla ley de la naturaleza, a dejar correr sus pasiones por sus pendientes más naturales, y en cuya alma siempre se encontraba seco el río de las grandes pasiones de tantos y tantos desagües que abría en él diariamente ignoraba con cuánta furia hierve el mar de las pasiones cuando se le cierra toda salida; cómo se amontona, se hincha y revienta; cómo corroe el corazón; cómo estalla en llantos interiores y sordas convulsiones, hasta que rompe sus diques y quiebra su fondo…”

Que os aproveche.


¿Has pensado alguna vez que se puede aprender algo de la vida de una hormiga, de un ratón o de un perro? Pues si no estás siendo muy bueno en esta vida, tendrás oportunidad de experimentar estas vidas en las infinitas reencarnaciones que te tocará vivir hasta que, acumulando “el maldito Karma”, llegues al anhelado Nirvana de paz y estabilidad.
Si te animas a leer esta obra acompañarás el camino que le toca a una exitosa presentadora de televisión que triunfa en la vida profesional pero quiebra en su vida personal, familiar y afectiva.
¿Qué nos puede enseñar esta comedia? Que se debe vivir más al día, aprovechar mucho más el tiempo presente viviendo para los otros, que esto es lo único que nos puede acercar a la felicidad, esa leve sensación de estabilidad que a veces se siente en la vida y que siempre que queremos asirla se nos escapa…, pero así es la cosa. Disfrutarla, no es una maravilla, pero está entretenido.


Desocupado lector: el comienzo lector del verano fue con la obra "El árbol de la ciencia” de Pío Baroja, gracias a una compañera de trabajo que me lo recomendó. La obra nos lleva al Madrid burgués y proletario de finales del siglo XIX y nos narra la vida del estudiante de medicina Andrés Hurtado, su posterior desempeño laboral como médico en Alcolea y un trágico final con historia de ¿amor? incluida. Obra íntima y en tono pesimista en lo personal y despiadada en la descripción que realiza de la situación social de la época: caciquismo, ignorancia, desidia, resignación… por medio, un gran diálogo filosófico en el que aparecen posturas enfrentadas: el idealismo alemán, defendido por Andrés Hurtado y el pragmatismo anglosajón del doctor Iturrioz, tío y “confesor” de nuestro protagonista. Obra clara de la generación del 98, con todas sus características: pesimismo, aburrimiento, melancolía, amargura existencial…, un no saber lo que quiero, que me inquieta y no me deja vivir. Al final, ni siquiera el amor parece ser la solución. Y una pregunta: "¿qué habría sido de Andrés Hurtado si hubiera sentido de verdad vocación por la medicina o por la dedicación a los demás?". Os lo recomiendo. Un abrazo.


Desocupado lector: no me contenté con la película "La invención de Hugo" y también me he leído la novela homónima de Brian Selznick. La que ha caído en mis manos, o mejor dicho, en mi ebook, es una coqueta versión con infinidad de dibujos que hacen la lectura mucho más real y atractiva. La verdad es que el guión de la película sigue de manera muy fiel el libro de Selznick con lo cual aporta poco a lo ya referido en el apartado "Materiales" de este mismo blog, pero ahí queda dicho que existe también la versión novelada para los que sean más de lectura que de películas. Que la disfrutéis. Un abrazo.






Desocupado lector: en 1862 vio la luz la impresionante obra "Los miserables" de Victor Hugo, cuya lectura he disfrutado en estos últimos días y ahora brevemente os resumo. Magnífica obra desde el punto de vista histórico, humano, psicológico, literario..., de estilo romántico, que plantea a través de su argumento un razonamiento sobre el bien y el mal, sobre la ley, la política, la ética, la justicia y la religión. Sólo os voy a destacar dos personajes: el protagonista Jan Valjean y el obispo Myriel. Comencemos por este último citando algunas frases que resuman su manera de ser y actuar:

"No condenaba a nadie apresuradamente y sin tener en cuenta las circunstancias y solía decir: veamos el camino por donde ha pasado la falta..."

y la siguiente, se me antoja, de una tremenda actualidad:

"La sociedad es culpable por no dar instrucción gratis. Es responsable de la oscuridad que con esto produce. Si un alma sumida en las tinieblas comete un pecado, el culpable no es en realidad el que lo hace sino el que no disipa las tinieblas"

Y dirigiéndose al protagonista, Jan Valjean, ex-presidiario:

"Jan Valjean, hermano mío, vos no perteneces al mal sino al bien. Yo compro vuestra alma y la libro de las alas negras y del espíritu de la perdición y la consagro a Dios".

O esta haciendo referencia a la fuente de su ser y actuar:

"Hizo una breve oración y en un momento estaba en el jardín donde se paseó meditabundo contemplando con el alma y con el pensamiento los grandes misterios que Dios descubre por la noche a los ojos que permanecen abiertos"

Y del protagonista Jan Valjean, ¿qué decir? Pasó 19 injustos años en el presidio por un robo motivado por el hambre y la miseria. Tras la pena y el encuentro con el obispo Myriel, intentó rehabilitarse encontrando dificultades y persecución por todos lados. Su papel representa la honradez, la conciencia recta, la bondad, la justicia consigo mismo y con los demás, la fe en el Dios que perdona y cuida providentemente...

Lectura obligada para todos aquellos que deseen un mundo mejor donde los miserables y pobres aún tenga futuro. Que os aproveche. Un abrazo.




Desocupados lectores: ¿quién dijo que el fútbol era la subcultura del pueblo?, ¿qué era de incultos e iletrados?, ¿qué era sólo pan y circo o el opio del pueblo? Eduardo Galeano, prolífico escritor uruguayo que se ha atrevido con casi todo, también lo ha hecho con el fútbol rindiéndole un cálido homenaje. Para el uruguayo, el fútbol es “música en el cuerpo, fiesta de los ojos”, pero también estructuras de poder de uno de los negocios más lucrativos del mundo en el que lo más importante es ganar… partidos y dinero. La obra realiza una mirada a sus mitos, su historia y sus personajes. En una galería que va desde Maradona a Pelé, pasando por Garrincha o Sanfilippo; desde los viejos enfrentamientos del fútbol rioplatense hasta los clásicos Fla y Flu, pasando por los mundiales. Geniales las expresiones descriptivas como: “el fútbol es la única religión que no tiene ateos”, “el jugador que había empezado jugando por el placer de jugar, ahora juega en los estadios por el deber de trabajar y tiene la obligación de ganar o ganar”. “El gol es el orgasmo del fútbol, como el orgasmo, el gol es cada vez menos frecuente en la vida moderna”, “el árbitro es la única unanimidad del fútbol: todos lo odian”…
Termino mi recensión con una bella afirmación que hace Galeano de sí mismo y el fútbol: “Yo quise ser jugador de fútbol como todos los niños uruguayos. Jugaba de ocho y me fue muy mal porque siempre fui un pata dura terrible. La pelota y yo nunca pudimos entendernos, fue un caso de amor no correspondido. También era un desastre en otro sentido: cuando los rivales hacían un linda jugada yo iba y los felicitaba, lo cual es un pecado imperdonable para la reglas del fútbol moderno”. Es breve, os lo recomiendo. Un abrazo.


Desocupado lector: por fin terminé la trilogía de Suzanne Collins con el libro "Sinsajo". De los tres libros me ha parecido el más lento y aburrido; se gastó la originalidad y la inspiración a medida que fue avanzado la historia. Pero esta tercera obra tiene también algunas aplicaciones interesantes y actuales: la importancia e influencia de los medios de comunicación pues, como dijo Francis Bacon "la información es poder". Se observa cómo los dos bandos en lucha usan los mass media para ganarse la opinión pública y para disparar al enemigo sin necesidad de pistolas. Otro tema muy interesante: al final de la película, los vencedores sienten deseos de venganza y están a punto de convertirse en unos nuevos tiranos tan pésimos y destructores como los que ya había. Y es que la principal batalla que el hombre debe siempre establecer no es contra las estructuras externas que oprimen sino contra las "estructuras internas" de su corazón, siempre capaz de lo mejor, pero también de lo peor. Relacionado con la religión, se entiende que "el fuego y la guerra" que vino a prender Jesús de Nazaret no fuera contra "el romano imperalista, puñetero y desalmado" sino contra el odio de los corazones, tanto judíos, como paganos. Quizá por este final, y no sólo porque se os quede "coja" la historia recomiendo también la lectura de esta tercera obra. Un abrazo.


Desocupado lector: ya me he leído la segunda parte, "En llamas" de la trilogía que llevamos entre manos. la revolución que yo vaticinaba y deseaba en la primera novela ya está aquí: las fuerzas del mal parecen no tener la última palabra en esta historia y los pobres, débiles y necesitados pueden hacer mucho más de lo que creen si son capaces de unirse. Otro mundo tendríamos si hubiera más unión entre las personas ante los grandes poderes insensibles. La revolución definitiva quedará para la tercera parte de la trilogía. Como dice una buena amiga: "en ello estamos". Que los disfrutéis si os animáis a leerlo. Un abrazo.


Desocupado lector: ya he tenido tiempo de leer "Los juegos del Hambre" de Suzanne Collins y ahora estoy con la segunda parte "En llamas". Mi intención es leer la trilogía que se completa con la obra "Sinsajo". La verdad es que después de haber visto la versión cinematográfica, que os comenté en la página de películas, me parece aún más buena la obra. La película está muy bien adaptada y bastante fiel a la novela y ésta te aclara algunos puntos que quedan obscuros en el film. Se lee con mucha facilidad y engancha desde el primer momento. Os recuerdo de qué va: en una oscura versión del futuro próximo, doce chicos y doce chicas se ven obligados a participar en un reality show llamado los juegos del hambre. Sólo hay una regla: matar o morir. Cuando Katniss Everdeen, una joven de dieciséis años se presenta voluntaria para ocupar el lugar de su hermana en los juegos, lo entiende como una condena a muerte. Sin embargo Katniss ya ha visto la muerte de cerca y la supervivencia forma parte de su naturaleza. ¡Que empiecen los septuagésimo cuartos juegos del hambre! En cuanto a las ideas interesantes y actuales que siempre me gusta encontrar en lo que veo y leo, os cuento casi lo mismo que en la página de la película: un mundo injusto, cruel, de vencedores y vencidos, de lucha y dignidad..., de ricos y pobres, de estatus sociales que parecen inamovibles, con un tema de revolución y cambio social que, no os adelanto, estará aún más presente en la segunda parte "En llamas". En fin, no esperaba yo a mi edad engancharme con una serie de ciencia ficción de este estilo pero que debo confesar, me tiene bastante "picado". De nuevo os la recomiendo. Un abrazo.



Desocupado lector: otra historia de Khaled Hosseini titulada "Mil soles espléndidos". Burkas, talibanes, dictaduras, guerras, hambres, injusticias, mujeres discriminadas y, sobre todo, una historia de amor, honestidad, amistad y otros nobles sentimientos. El poeta había descrito Kabul como aquella ciudad en la que "eran incontables las lunas que brillaban sobre sus azoteas, o los miles de soles espléndidos que se ocultaban tras sus muros". Recuperar esta belleza se antoja tarea difícil entre tanto odio racial pero la belleza y los soles espléndidos están en el interior de las personas, en Mariam, capaz de obedecer siempre a la vida, en Laila, soñadora que no se resigna al dolor, en Tariq, víctima de las minas anti-persona que nunca "minaron" su alegría y ganas de vivir..., Sin llegar a la calidad de "Cometas en el cielo", una buena novela para conocer otras culturas y realidades sufrientes que nos espabilen de nuestras comodidades. Un abrazo.


Os recomiendo una lectura bella: "Cometas en el cielo" de Khaled Hosseini. Historia de amistad, fidelidad, intolerancia, dolor, lucha y superación y, sobre todo, un camino para "volver a ser bueno". Como suele ser habitual, la versión cinematográfica suele dejar insatisfecho tras la lectura del libro, pero para los que os cueste la lectura, tenéis la posibilidad de ver una buena película con el mismo título, versión del 2007 de Marc Forster. Que os aproveche. Un saludo.










Y en mi convalecencia he leído un clásico de Alejandro Dumas: "El conde de Montecristo". Dolor, traición, celos, envidia, venganza, amor, pasión, desesperación, esperanza, intriga, enredo inteligente... todo un tratado acerca de las emociones y pasiones que asolan a todos los seres humanos. Referencias a Dios como Providencia, con un extraño concepto no teológico de vengador, al dios dinero, poderoso caballero que todo lo puede y a una actitud humana que todos deberíamos aprender: ¡Confiar y esperar!. Os recomiendo la lectura. Un saludo.

6 comentarios:

  1. No tenía conocimiento de tu blog. Me parece muy oportunas las recomendaciones que haces de literatura y cine. Ánimo y adelante.
    José Antonio Ruiz la Torre
    Biblioteca de Alcaudete.

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  2. Gracias José Antonio: sigamos compartiendo cultura. Lástima que me haya decidido tarde a entrar en este mundo de los blogs. Mi intención es seguir comentando todo lo que vaya viendo y leyendo. Si os animáis a hacer lo mismo podremos crear juntos un club de lectura virtual por estas redes. Un abrazo.

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  3. Hola Juanfra! Te voy a hacer varias recomendaciones de lecturas, a ver qué te parecen:
    - El desorden de tu nombre, de Juan José Millás
    - Once minutos, de Paulo Coelho
    - La reina del sur, de A. Pérez Reverte
    - El catolicismo explicado a las ovejas, y Los años del miedo, de Juan Eslava Galán (en los últimos tiempos ha sacado una serie de libros de historia reciente de España bastante interesantes y fáciles de leer, por su aporte histórico y la forma de contarlo, en tono irónico).

    Un abrazo,
    M Mar

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    1. María del Mar, nunca es tarde si la dicha es buena..., ahora mismo me acabo de dar cuenta de que no te respondí..., no está mal, sólo dos meses después, jaja. Conseguí la mayoría de los libros que me recomendabas y están en lista de espera para ser leídos, sobre todo Pérez Reverte que hace mucho que no lo leo. En cuanto a Coelho, fui uno de sus más fieles seguidores y propagadores de su obra, sin que se dignara a darme un porcentaje, pero terminó pareciéndome iguales todos sus libros. "Once minutos" está bastante bien; un comentario jocoso: ¿no son muchos minutos?, jajaja, y otro en serio: tú como psicóloga ya sabes que el amigo Freud planteaba que lo único que movía al mundo eran esos "once minutos", claro, Paulo Coelho habla también del amor, no sólo de la pulsión sexual, que también. En cuanto a nuestro paisano Eslava Galán es muy mordaz y muy intuitivo, para mi humilde opinión su obra más genial es "En busca del Unicornio",que le valió el Premio Planeta en 1987. Luego destila un tufillo humorístico-anticlerical que no me resulta desagradable pero sí a veces muy repetitivo y trasnochado; esos tiempos, gracias a Dios, ya pasaron, la memoria histórica no es juzgar lo actual con criterios antiguos, no es regañarme ahora porque de pequeño me comía los mocos..., eso, que sigas con tu buena labor lector y me recomiendes más cosas. Gracias.

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  4. Hola Chico,

    Me alegro de que el encuentro con Murakami no haya ido mal. A mi me atrapó en este libro su manera de narrar, de poner palabras a sentimientos y situaciones de forma que consigue trasladarte a otros territorios (siendo el argumento nada especial). Kafka en la orilla sin duda merece la pena... Murakami sigue abriendo puertas que te llevan mas allá de la realidad... ¿Adonde? ¡Ya me contarás! Yo sigo con "señorita Escarlata" de Criadas y Señoras (gracias!). Bueno, nos vemos y enhorabuena por el blog! Lourdes

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  5. Hola Lourdes¡¡¡ muchas gracias por echar un ojo a mi blog, creí que sólo lo miraba mi hermana, jajaja. Cuando termines el de "Criadas y Señoras" me contarás porque yo sólo vi la película pero no leí la novela y siempre enriquece mucho más la lectura. Aparte de la historia, es interesante el hecho de "narrar historias" que conlleva la película: historias de esfuerzos, luchas superación, honradez... de todo eso que creemos que no existe pero que ahí está. Un beso.

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